martes, 12 de julio de 2016

Una monstruosidad filosófica

 La esperanza es esa suposición ontológica, cosmológica y ética, según la cual el mundo no es simplemente algo que se encuentra allí fuera, sino un cosmos en el sentido propio y arcaico, un orden total que nos engloba a nosotros mismos, a nuestras aspiraciones e iniciativas, como sus elementos centrales y orgánicos. Traducida en términos filosóficos, esa hipótesis se transforma en la creencia de que el ser es fundamentalmente bueno. Platón, como todos saben, fue el primero que osó proclamar esa monstruosidad filosófica, después del final del período clásico. Y tal monstruosidad continuó siendo el dogma fundamental de la filosofía teológica, en Kant, ciertamente, y también en Marx. Pero el punto de vista griego está expreso en el mito de Pandora... 

-Cornelius Castoriadis